Con el arranque de 2025, comprender y anticiparse a las tendencias globales de la industria es crucial para afrontar los cambios que están redefiniendo el sector. La 43.ª Conferencia Anual de Salud de J.P. Morgan, celebrada en enero, fue el escenario perfecto para interactuar con los principales actores del sector y comprender los cambios financieros y estratégicos que lo están transformando. Nuestro CEO, Jurgen Van Broeck, y nuestro Global Partnering and Portfolio Director, José Ramón Millán, se reunieron en San Francisco con líderes del sector para analizar el panorama actual, desde las políticas comerciales de EE. UU. hasta el auge de los biosimilares. Estas son las principales conclusiones y su impacto en el año que comienza.
El impacto de la administración estadounidense en 2025 y el Biosecure Act
La nueva administración de EE. UU. ha puesto sobre la mesa la implementación de medidas proteccionistas en el mercado farmacéutico. Un claro ejemplo de esto es el proyecto de ley «Biosecure», que busca reducir la dependencia estadounidense de ciertas empresas chinas para 2032. Esta legislación podría limitar las importaciones desde Asia, afectando potencialmente las cadenas de suministro globales.
Para las empresas europeas, esto supone un doble efecto: por un lado, podrían aprovechar las oportunidades que surjan al cubrir el espacio dejado por las restricciones a productos asiáticos; por otro, se enfrentan a la posibilidad de nuevos aranceles sobre los productos europeos que ingresen al mercado estadounidense. En este contexto, una planificación estratégica sólida será clave para navegar estos cambios comerciales.
El auge de los medicamentos biosimilares
Uno de los grandes temas de la conferencia fue el crecimiento de los medicamentos biosimilares, especialmente ahora que las patentes de muchos biológicos están llegando a su fin. Tanto en economías emergentes como en regiones desarrolladas como Europa y EE. UU., los biosimilares están ganando terreno en los procesos de licitación, desplazando a los fármacos innovadores. En el área de oncología, su adopción está marcando una gran diferencia, ofreciendo tratamientos más asequibles sin comprometer la seguridad ni la eficacia. Como bien señaló nuestro Director de Asociaciones, «los biosimilares están viviendo un momento de oro», consolidándose como piezas clave en el sistema de salud moderno.
El crecimiento de los competidores asiáticos
Otro punto destacado en la conferencia fue el crecimiento de las empresas farmacéuticas asiáticas, muchas de las cuales operan con costos de producción inferiores a los de sus homólogas europeas. Si bien el factor precio es determinante, en muchos mercados la calidad sigue siendo la prioridad. Para las compañías europeas, esto refuerza la necesidad de mantener altos estándares de calidad y aprovechar su reputación de excelencia. Al mismo tiempo, es crucial continuar mejorando los procesos de fabricación para seguir siendo competitivos.
En resumen, los aprendizajes obtenidos en la Conferencia de Salud de J.P. Morgan evidencian la dinámica cambiante de la industria farmacéutica global. Para seguir siendo competitivos en este entorno en constante evolución, es fundamental innovar, fortalecer alianzas estratégicas y anticiparse a los desafíos del mercado. Solo así podremos garantizar un acceso equitativo a tratamientos de calidad en todo el mundo. Mantenerse informados y adaptarse rápidamente será esencial para seguir ofreciendo soluciones de salud accesibles y de alta calidad en todo el mundo.